Corto
Maltés en Siberia
Ya
sabemos que Pratt tenía sus colaboradores, principalmente de cara a
realizar decorados o maquinaria, ocupándose él por completo del
resto de la obra. De entre esos colaboradores que aportaron su parte
al dibujo destacan dos nombres. Lele Vianello, dibujante italiano que
tuvo cierto peso en historias como Cato
zulú y
que logra adoptar un estilo bastante fusionado con respecto a Pratt
pero con diferencias que saltan a la vista. El otro gran colaborador
es Guido Fuga. Este arquitecto reconvertido en dibujante conoce a
Pratt en el festival de Lucca. En medio del barullo propio de todo
festival un grupo de dibujantes preguntó a Pratt por qué Corto no
había ido nunca al país natal de Rasputín. Pratt, en broma,
contestó que lo único interesante de ese país es Siberia y que un
cómic sobre Siberia sin trenes ni era cómic ni era nada. Guido no
se quedó callado, "amigo yo te dibujo los trenes". Y de
esta feliz e inesperada unión paso Guid Fuga a formar parte del
equipo de Pratt, y habría que añadir incluso que fue una parte
importantísima que retrató con un realismo espectacular todo tipo
de medios de transporte como trenes, automóviles y aviones. Visto el
magnífico trabajo realizado Pratt presentaba siempre a Guido como
"el dibujante de trenes de Corto Maltés en Siberia"
reconocimiento que no hizo con Vianello de cuyas colaboraciones poco
se supo hasta la muerte del maestro.
Tras
realizar los veinte episodios publicados en Pif,
Pratt se interesó por el barón Von Urgern-Sternberg a partir de la
lectura de la enciclopedia militar inglesa. Descubrió así que
Ungern-Sternberg fue rey de Mongolia durante algún tiempo. A la
curiosidad por este personaje se unió el interés por conocer el
entramado de las sectas secretas chinas y el funcionamiento de la
armada imperial rusa. Todo este interés nace de la amistad de Pratt
con Jean Mabire, autor del libro Ungern
el barón loco,
volumen que ayudó mucho a Hugo en la elaboración de la aventura en
Siberia.
Con
los espléndidos trenes de Guido sombreados por Pratt, sin duda los
mejores trenes de toda la Historia del cómic comenzó a realizarse
una de las mejores aventuras largas de Corto Maltés. Una historia
que quizás sea la que más personajes reales presente. Además del
barón encontramos a Koltchak, quien recuperó el oro del Zar,
Sémenov, jefe de los cosacos del Baikal, Jack Tippit, personaje que
toma prestada apariencia y nombre de un amigo de Hugo Pratt que fue
coronel del ejército del aire americano y que posteriormente llegó
a presidente de la National
Carttonist Association.
Hugo
Pratt empleó ni más ni menos que tres años y medio en realizar las
99 planchas de las que se compone la aventura, aunque es cierto que
realizó simultáneamente otras historias del ciclo Los
Escorpiones del Desierto.
A partir de esos momentos la productividad del maestro desciende para
empezar a tomarse el trabajo con cierta calma.
Curiosamente
Corto Maltés no fue reconocido en Italia hasta después de su
edición francesa en Pif.
Corto
Maltés en Siberia
empezó a publicarse en Italia en las páginas de Linus
justo en el momento en el que el personaje iba ganando fuerza dentro
del país de origen de su autor. En este álbum asistimos al retorno
del amigo Rasputín.
El
mismo Rasputín acabará por robar a Corto Maltés un pequeño
Gauguin de su vivienda en Hong- Kong. Por cierto, es la primera y
última vez en la que veremos a Corto en su propio domicilio.. Todo a
causa de haber perdido mucho dinero y sentimiento, si lo tiene, en el
asunto del tren del oro. Al fin y al cabo puede justificar robar a
Corto como compensación a sus pérdidas.
Hablando
sobre los protagonistas Pratt nos cuenta que Corto es una persona
inmoral. Es decir, Conoce dónde se encuentra la moral y en numerosas
ocasiones va contra ella. En cambio Rasputín es una persona amoral,
es decir, ni siquiera conoce la existencia de la moral y por lo
tanto, tampoco el remordimiento. En La
Casa Dorada de Samarkanda
una niña armenia le preguntará al marino si Rasputín es malo,
Corto contesta que sí lo es pero que él no lo sabe. La relación
entre ambos personajes es muy especial y el uso que hace el autor de
los dos personajes, absolutamente magistral, utilizando a uno o al
otro de forma perfecta en la trama de la historia.
Este libro me ha parecido excepcional por dos razones: Es muy entretenido e interesante y porque para complementar información hemos visto una película sobre ese mismo episodio. Les recomiendo ver la película y leer el cómic.
ResponderEliminarEste libro ha sido entretenido ya que teíia mucha acción y aventuras.
ResponderEliminarTambién vimos la pelicula y me gustó más que el libro porque parecia que había más emoción.
Recomiendo el libro y la pelicula.
Corto Maltés en Siberia es una película muy interesante, y entretenida. tiene una intriga muy intensa, y misterio apasionante. es muy interesante que se hable del amor de Corto Maltés y de su época en el continente asiático. Se la recomiendo a todo el mundo.
ResponderEliminarTrata sobre cómo Corto y Rasputín viajan a Siberia en busca de oro, que va cargado en un tren. Esta historia cuenta con numerosos personajes al igual que con numerosas traiciones. Es un cómic entretenido de leer, con una trama de lo más interesante.
ResponderEliminarEl cómic Corto En Siberia es muy entretenido porque ocurren muchas cosas en él. Y la presencia de personajes como, por ejemplo, las Linternas Rojas, intensifica más ese entretenimiento. Aunque la verdad es que hay otros personajes que no quedan bien definidos. Este cómic me ha parecido, sin embargo, un poco difícil de entender al principio, pero en cuanto ví la película todo me pareció más claro. La película, en mi opinión es muchísimo mejor que el cómic, pues, como he dicho, lo muestra todo mejor, más claro, etc. Aunque se me hizo un poco larga.
ResponderEliminarLa película de Corto En Siberia me ha parecido interesante y me ha gustado mucho. La película me ha gustado mas que el libro. En general recomiendo el libro y la película. ( Sergio González Sánchez)
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